TIPOS DE TIEMPO Y COMENTARIO DE MAPAS
METEOROLÓGICOS
Tipos de tiempo:
Un mapa meteorológico es aquel que representa gráficamente el tiempo
atmosférico previsto. El tiempo atmosférico es el resultado de considerar las
condiciones de presión, vientos, temperatura y humedad en un área más o menos
amplia y de forma evolutiva.
La base está siempre en interpretar la influencia de las células de
presión. Por eso, según dominen unas u otras hablamos de tipos de tiempo
ciclónicos o anticiclónicos.
Los tipos anticiclónicos son aquellos donde la
zona considerada está bajo la influencia de un anticiclón. Son causantes de
tiempo soleado y estable. En verano van asociados a altas temperaturas y en
invierno a bajas temperaturas, heladas nocturnas y nieblas en el interior.
El tipo ciclónico, por el contrario hace que en la zona
considerada domine el tiempo inestable, con abundante nubosidad, vientos más o
menos fuertes y alta probabilidad de precipitaciones.
Distribución anual de los tipos de tiempo:
*VERANO: Dominan las
situaciones anticiclónicas, dado que en anticiclón permanente y subtropical de
las Azores se desplaza hacia el norte, al igual que las bajas presiones
subpolares, quedando por tanto buena parte de España bajo la influencia del
anticiclón, ya que el Frente Polar se desplaza hacia el norte.
*INVIERNO: Pueden combinarse situaciones en las que nos
atraviesa el Frente Polar, provocando tiempo inestable y lluvioso o aquellas
otras donde nos afectan los anticiclones térmicos del continente europeo o los
anticiclones noratlánticos propiciados por las ondulaciones del Jet Stream. En
estos últimos casos se produce un tiempo estable y frío, que ocasiona a veces
olas de frío.
*ESTACIONALES EQUINOCCIALES: Dominan, sobre todo,, en otoño y principios de la primavera. Son
situaciones en la que nos atraviesa el frente polar creando un tiempo inestable.
¿Cómo se comenta en un mapa meteorológico?
Es conveniente que el comentario del mapa siga
una estructura para que no dejemos de analizar cuestiones fundamentales. En
este sentido habremos de identificar y ubicar las células de presión; observar
si nos afectan o no observando las isobaras del territorio español; en caso
afirmativo señalar qué tipo de masas de aire nos mandan (Temperatura y
humedad), dónde confluyen esas masas; señalar qué tipo de presión nos afecta;
cuál es la dirección y fuerza de los vientos observando las líneas isobáricas;
señalar si nos afectan frentes y de qué tipo y cuál pudiera ser el recorrido de
dichos frentes. Finalmente haremos una interpretación del tipo de tiempo y le
daremos el nombre adecuado.
De forma concreta hay que atender a los siguientes aspectos:
1º Observaremos la fecha a la que corresponde el mapa. Esto nos
será de gran ayuda para orientarnos a propósito de cómo pueden ser las
temperaturas para esa época del año, si corresponde a un período anual húmedo o
seco… Sobre todo nos evitará cometer graves errores en la valoración del tipo
de tiempo.
2º Localizar geográficamente dónde están las células de presión (Ejemplo: anticiclón
en el centro del Atlántico, borrasca al sureste de Islandia, anticiclón sobre
la Península Escandinava, borrasca de Génova…)
3º Observamos las isobaras que afectan a la zona que nos interesa y las señalamos atendiendo al
valor de su presión (en milibares o hectopascales). Por estos valores sabremos
si estamos bajo la influencia de un anticiclón o de una borrasca (tiempo
ciclónico). Recuerda que por encima de 1013 hP estaremos bajo el radio de
acción de un anticiclón y por debajo de 1012 del de una borrasca.
4º Buscaremos dónde se encuentra el centro de acción al que están asociados
esas isobaras. Esto es muy
importante, pues dependiendo de su localización habremos de deducir qué tipo de
masas de aire nos manda (cálidas o frías, secas o húmedas; es decir tropicales
marítimas, tropicales continentales, polares marítimas o polares continentales…).
Puede ocurrir que todo el territorio esté afectado por un solo centro de
acción o por más de uno, es decir, que toda España esté afectada por una
situación anticiclónica o de borrasca o, por el contrario, que distintas partes
se vean afectadas por varios centros de acción. Por eso procederemos del
siguiente modo:
Primero buscaremos las Altas Presiones o Anticiclones (A) que
nos asegurarán tiempo despejado. Señalaremos dónde se encuentra su centro, pues
los Anticiclones expulsan el aire del centro hacia sus bordes. Así, si se
encuentra en el norte de África nos mandará aire cálido y seco (puede
causarnos una ola de calor), pero si se encuentra en el norte de Europa el aire
que nos llegará será muy frío y seco (puede crear una ola de frío con
temperaturas muy bajas).
Después buscaremos las Bajas Presiones o Borrascas (por
debajo de 1012 hP). Estas Borrascas atraerán los vientos y los frentes y nos
darán un tiempo variable, inestable y puede que lluvioso.
5º Debemos seguir el recorrido de
las isobaras desde el centro de acción. En este sentido recuerda que tanto borrascas como anticiclones están
representados por medio de isobaras y que éstas marcan el recorrido
de las masas de aire, que -por otra parte- van modificando sus características en su desplazamiento y, por tanto, desde su
origen, pueden secarse o humedecerse, enfriarse o calentarse.
Para hacer el recorrido de las isobaras es fundamental tener en cuenta el
sentido de giro de las masas de aire en anticiclones (el mismo que las agujas
del reloj) y borrascas (sentido contrario al de las agujas del reloj). Recuerda
también valorar la dirección y fuerza del viento, considerando que si las
isobaras se encuentran muy juntas significa que el gradiente de presión (la
diferencia de presión) es muy elevada y por tanto nos encontraremos con fuertes
vientos. Si están muy separadas ocurrirá lo contrario.
Identificar las isobaras como perteneciente a un centro de alta o baja
presión servirá para saber en qué dirección soplan los vientos en la zona que
estamos considerando.
6º Una vez hecho esto nos fijaremos en los frentes. Su presencia anuncia
lluvias, diferentes en función de que el frente sea cálido o frío (esto se vio
en el tema 3). Las borrascas atraerán los frentes mientras que los anticiclones
servirán como escudo ante ellos, desviándolos, garantizando así el tiempo seco
y estable.
A medida que vamos comentando todos estos aspectos los aplicamos a nuestro
territorio –tano las Península como los archipiélagos- teniendo en cuenta la
altitud (que siempre bajará la temperatura), la latitud (más
temperatura cuanto más al sur) y las montañas (recordad las
lluvias orográficas y el efecto Föehn).
7º Si a cada paso hemos ido haciendo el
comentario necesario el remate final es denominar correctamente el tipo de
tiempo.
UN EJEMPLO:
El mapa del tiempo
presenta el estado de la atmósfera en superficie en pleno verano (25 de agosto).
En él podemos distinguir los siguientes centros de acción:
-Centros de acción
anticiclónicos: el anticiclón de las Azores, muy desplazado hacia el norte en latitud y
colocado frente a la Península Ibérica, dos anticiclones en el Atlántico
central, otro al norte de las Islas Británicas y otro sobre Sicilia.
-Centros de acción
ciclónicos: la depresión de Islandia, que lleva dos frentes asociados (uno
frío y otro cálido); un frente frío en el occidente de Francia; otro en la
Península escandinava, procedente de una borrasca muy septentrional, y una
depresión térmica en el norte de África.
España queda afectada
por las isobaras asociadas al anticiclón de las Azores –entre 1024 y 1020
milibares (o hP), por lo tanto se encuentra bajo el dominio de las altas
presiones: el anticiclón de las Azores, muy desplazado hacia el norte (propio
del tiempo de verano), ejerce una acción de bloqueo que impide el paso o desvía
hacia el norte a los frentes atlánticos, y aporta aire tropical marítimo
cálido, húmedo.
Lo anterior nos garantiza
tiempo cálido, seco, despejado y estable en la mayor parte de la Península, ya
que el anticiclón actúa de escudo y desvía los frentes que llegan por el
Atlántico hacia el norte. La prueba está en el frente situado frente a las
costas atlánticas francesas que se desplaza hacia el norte.
Las isobaras sobre
España están muy separadas, indicándonos la existencia de vientos flojos o
calmas.
La depresión térmica
del norte de África puede causar altas temperaturas en el levante y sur
peninsular, pero sobre todo afecta a Canarias, sobre las que envía aire
procedente del Este, sahariano, cálido y seco, que da lugar a altas
temperaturas (ola de calor) en las islas más orientales, suavizadas por la
corriente fría de Canarias.
Sería por tanto, un
ejemplo de SITUACIÓN ANTICICLÓNICA, con tiempo seco y estable, característico de
la época a la que el mapa se refiere..
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