Hasta la simple percepción de la realidad está polarizada. Llevamos tres semanas de lluvias casi diarias -muy lejos de los cuarenta días y cuarenta noches lloviendo a manta del Diluvio Universal-, con acumulados importantes pero no excepcionales medidos en su justa escala (Córdoba capital unos 290 litros en lo que va de marzo, pero aún no ha alcanzado la media anual, situada en 570. A finales de los 80 era de 640); y muy irregularmente distribuidos (mientras muchos pantanos están desaguando, el de Iznajar, el mayor de Andalucía y el que abastece a todo el sur de la provincia, sólo está al 30%). Pero qué más dan los datos cuando millones de españoles se acaban de sacar el grado de meteorólogo en su bar de referencia o tienen un "cuñao" que lo peta como cabañuelista. Lo que para unos es clara evidencia del cambio climático, para otros es la demostración de lo contrario y "qué cambio climático ni qué niño muerto, sigue lloviendo como toda la vida de Dios". Porque para ellos la meteorología no es cuestión de física compleja, interrelación de variables y dinámica atmosférica, sino de voluntad divina. Quizás por eso ya están organizando plegarias para que el Altísimo no les joda el espectáculo de la Semana Santa. A esta gente, en sus cortas entendederas, no les expliques que el cambio climático es irregularidad y situaciones extremas -de largas sequías a lluvias torrenciales-; no les cuentes que estas lluvias son resultado de la anormal disminución de la velocidad del "chorro polar”, que favorece las sinuosidades de esta corriente, responsable de la ubicación de anticiclones y borrascas o de las derivas meridionales de las depresiones aisladas en altura que provocan las Danas. Para qué pensar, si es más cómodo concluir que el "tiempo", es voluntad divina. Aunque cuando interesa la sequía la provocan los "chemtrails" de los aviones; la Dana de Valencia la provocó Marruecos usando la geoingeniería Haarp, porque "los moros", no contentos con inundarnos de "menas", ahora planean inundar nuestros campos; o el cambio climático es un invento de los "putos" meteorólogos, a las órdenes de la AEMET, a las órdenes del "Perro". Total, que se hunde el Puente Viejo de Talavera de la Reina -que no es la primera vez- y ya estamos otra vez: que si el cambio climático cuesta dinero, se cobra vidas y afecta al patrimonio; que la culpa la tienen los "verdes" y el gobierno que están destruyendo infraestructuras hidráulicas; que si la Confederación del Tajo ha ordenado "soltar agua" para joder... Y Feijoo corre a hacerse la foto y soltar eso de políticas de Estado sin ideologías -¡me parto!-. Y el telediario dice que el puente es "romano" y que sus arcos son ligeramente "apuntalados" -por apuntados- y que "ni la piedra ha podido resistir", cuando la parte hundida es una restauración de ladrillo... ¡Qué cansancio! Necesitamos un buen Diluvio que limpie el ambiente.
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